Los antioxidantes son sustancias que pueden prevenir o retrasar el daño a las células causado por los radicales libres, estos radicales son moléculas inestables que el cuerpo produce como reacción a las presiones del ambiente y de otro tipo.
Los factores que aumentan la producción de radicales libres en el cuerpo pueden ser internos, como la inflamación, o externos como, por ejemplo, la contaminación, la exposición a los rayos UV y el humo de cigarrillos.
El estrés oxidativo se ha relacionado con enfermedades cardíacas, cáncer, artritis, derrame cerebral, enfermedades respiratorias, inmunodeficiencia, enfisema, enfermedad de Parkinson y otras afecciones inflamatorias o isquémicas.
Se dice que los antioxidantes ayudan a neutralizar los radicales libres en nuestro cuerpo, mejorando nuestro estado de salud en general.
Las fuentes de antioxidantes pueden ser naturales o artificiales.
El cuerpo también produce algunos antioxidantes, conocidos como endógenos. Los antioxidantes que provienen del exterior del cuerpo se denominan exógenos.
Los antioxidantes se encuentran en muchos alimentos, incluyendo frutas y verduras. También se encuentran disponibles como suplementos dietéticos:
- Beta carotenos
- Luteína
- Licopeno
- Selenio
- Vitamina A
- Vitamina C
- Vitamina E
Fuente de alimentos ricos en antioxidantes:
- Arándanos
- Pimientos
- Zanahoria
- Jitomate
- Frutos rojos
Los siguientes consejos podrían ayudarte a aumentar tu consumo de antioxidantes:
- Incluye una fruta o vegetal cada vez que comas; en las comidas y colaciones.
- Toma una taza de té verde todos los días.
- Observa los colores de tu plato. Si tu comida es mayoritariamente marrón o beige, es probable que los niveles de antioxidantes sean bajos. Agrega alimentos con colores intensos.
- Usa cúrcuma, comino, orégano, jengibre, clavo y canela para sazonar y elevar el contenido de antioxidantes de tus comidas.
- Para tus colaciones prefiere semillas.
L.N. Vanessa Janet Ponga Blas
Universidad del Valle de México
Licenciatura en Nutrición